La Niña Mala...
Ésta noche voy a pasar un mal rato... ¿Te puedo pedir un favor? No le toques, no lo beses delante de mí.
Kuriko se echó a reír y me tapó la boca con la mano.
-- Calla, tonto. Aquí hay una diferencia grande entre lo que se hace en público y lo que se hace en privado, que las cosas más naturales para nosotros, a ellos les chocan. Él no es como tú. Fukuda a mi me trata como a su empleada. A veces como a su puta.
Tampoco debiste decirme que ese japonés te trata como a su puta. ¿No ves que es como si me despellejaras vivo?
La sala estaba sobriamente amueblada... en unas repisas unas esculturas polinesas... Mitsuko y Salomón ya estaban allí con copas de champagne en las manos...
No hay comentarios:
Publicar un comentario