ALUCINACIÓN... 8 ok
Remembranza
de un Lobo Estepario.
--
Al llegar al primer piso, justo donde desemboca la escalera, el pequeño
vestíbulo de una vivienda, sin duda la más limpia y lustrosa, sobre el suelo de
parquet, que uno no se atreve a pisar hay dos grandes macetas, en una crece una
azalea, en la otra una araucaria bastante magnifica y de la mayor perfección
hasta la última hoja de la última rama. Uso este lugar como un templo, me
siento en un escalón, descanso un poco, junto las manos y miro con devoción a
este dechado de orden, cuyo aspecto emotivo me conmueve el alma de un modo
extraño. Detrás de ese vestíbulo, barrunto una vida llena de decencia y de
salud.
Un día trajo a su memoria el recuerdo
de su maestro de infancia, aquel que lo inició en los rudimentos de la
historia, la geografía y las matemáticas. Ese profesor que vivía su vida a
plenitud lleno de alegría, humano hasta el fondo del alma. Un hombre
al que vio la última vez sentado en la calle junto a la puerta de un
gran edificio vendiendo un dibujo mal hecho, con el que aspiraba a paliar su pobreza
y al que no pudo ayudar por estar, tal vez, en idéntica situación. Con la única
y gran diferencia de contar con el vigor físico que no poseía su maestro.
No hay comentarios:
Publicar un comentario