Cuando llegamos al vestíbulo, el sargento dijo:
-- El capitán quiere verle -- Está bien, enséñeme el camino
Sobre la puerta, escrito a mano: "Capitán Peterson". Resultó ser un hombre corpulento y fuerte.
-- Soy el capitán Peterson
-- John Berry
Su apretón de manos fue cordial, sus ojos se mantenían fríos e inquisitivos
-- El sargento me dijo que no lo había visto a usted nunca. Conocemos a la mayoría de los abogados de la ciudad.
-- Yo no soy abogado -dije
-- Esa no es la impresión que le dio usted al sargento
-- Entonces se equivoca
-- Si hubiéramos sabido que no era usted abogado, nunca le hubiéramos permitido ver a Lee.
-- No me preguntaron ni mi nombre ni ni mi profesión, tampoco se me pidió que firmara como visitante.
No hay comentarios:
Publicar un comentario