La Niña Mala, fragmentos de la novela de Mario Vargas Llosa.
Pronto encontré una rutina de trabajo que, aunque a ratos me aburría tampoco me desagrada. Cuando, tratando de ser objetivo examinaba mi vida, empezó a parecerme bastante estéril y mi futuro el de un solterón que nunca se integraría a la Francia de sus amores...
Estábamos tomando una cerveza. Yo, en un arranque, le acababa de contar que hacía muchos años estaba enamorado de una mujer que aparecía y desaparecía como un fuego fatuo...
-- Enamorarse es un error-- sentenció Salomón Toledano... ... A la mujer, atrápàla por los cabellos, arróllala y a la colcha. Esa era la teoría.
Yo no puedo practicarla. Alguna vez lo intenté, dí con una hembra brava y me gané un bofetón
No hay comentarios:
Publicar un comentario